Ayer se disputó la final de ida del Apertura 2020 entre Olimpia y Marathón. Un duelo también interesante por la mala relación que hay entre Pedro Troglio y Héctor Vargas, entrenadores de cada equipo respectivamente. Para sorpresa de muchos, esta vez no hubo ninguna discusión entre ambos.

El encuentro terminó 2-0 para los Albos y resta la vuelta para definir al nuevo campeón del fútbol hondureño. Más allá del resultado, todas las cámaras se quedaron con un gol que fue anulado por parte del árbitro y que lo habría hecho mediante a la utilización de un VAR no oficial. Así lo afirmaron ambos directores técnico cuando finalizaron los 90 minutos.

Jonathan Paz anotó el 2-0 parcial a los 57 minutos estando en offside. El línea no vio la posición adelantada y salió corriendo hacía mitad de campo para validarlo, pero paró su marcha para regresar y cobrar la posición ilícita. Este cambio de decisión se realizó debido a que le avisaron desde afuera, y con ayuda de las cámaras, de que estaba adelantado. Hay que recordar que el VAR no está aprobado y no se utiliza en la liga catracha.

Pedro Troglio fue el primero en reconocer lo que sucedió, pero se tomó a bien la decisión de no cobrarle un gol a su equipo: "Sacaron el VAR, desde allá (fuera del campo) les avisaron, está bien anulado y me parece que ya estaba convalidado, es un poco loco, pero está bien, ya está, el 2-0 es un resultado nada despreciable”.

Para que no queden dudas, Héctor Vargas también confirmó lo sucedido: "Lo bueno es que hubo VAR, avisaron a través del VAR y lo anularon". Insólito lo que ocurrió en la final y, gracias a como se lo tomaron ambos entrenadores, esto no terminó en un escándalo. Veremos si ese gol anulado será protagonista en la vuelta que jugarán el domingo.