Jason Casco, exjugador de varios equipos de su país y que también fuera integrante de la Selección Nacional de Nicaragua, fue condenado este jueves a 33 meses de prisión, luego que fuera encontrado culpable con un delito relacionado al crimen organizado, según informaron las autoridades de la nación pinolera.
Según se dio a conocer en la audiencia, Casco deberá guardar prisión por el delito de “conspiración para el crimen organizado”, por lo cual deberá estar sin libertad hasta noviembre del 2023, según el veredicto del juez séptimo del Distrito Penal de Managua, Nicaragua y que suma un escándalo más al futbol pinolero en los últimos meses.
Casco de 31 años pertenecía a una banda que estuvo involucrada en varios actos delictivos, que se llamaba Cainsa, según el Ministerio Público, el exfutbolista tenía la misión de hacer vigilancia en los locales, para que los demás integrantes fueran robar a empresas y casas comerciales de diferentes regiones de Nicaragua.
También estuvo involucrado en amaño de partidos
Jason Casco no solo ha tenido problemas con la justicia, hace unas semanas salió en el listado que dio la Federación Nicaragüense de Futbol (Fenifut) de las personas que estaban involucradas en una red de amaño de partidos, que inmediatamente fueron expulsadas del balompié de aquel país y que causó un escándalo.
El exjugador es recordado por haber sido futbolista del 2009 al 2020, cuando defendió los colores de Real Estelí, Walter Ferreti y Juventus de la Primera División, con la Selección de Nicaragua jugó seis partidos, entre ellos la Copa Centroamericana del 2014.