El futbol hondureño recibió una mala noticia luego que el pasado jueves Emilio Izaguirre sufriera una ruptura en el tendón rotuliano y un esguince de ligamento cruzado en el partido de Marathón contra Motagua por la Liga Concacaf, siendo un golpe fuerte en su carrera, que le ha impactado y todavía no ha logrado superar en lo anímico, según declaró en una entrevista desde el hospital.

 

Siempre tuve ese dolor, jugaba así con ese problema, he sufrido bastante. A veces he jugado bien a veces mal, porque sé que no he estado al cien, pero son cosas que uno de futbolista se guarda, es feo estar así y después ocurre lo que me pasó, fue uno de los momentos más duro de mi vida. Yo pensaba que era ligamentos cruzados, pero son cosas que Dios sabe por qué pasan, estoy triste, pero el apoyo de mi esposa, de mis compañeros, del equipo y la directiva se ha portado a la altura”, dijo Izaguirre.

"Lo peor, muy triste porque hace 10 años no me lesionaba así. Lloré mucho, me siento triste todavía, hasta temblando porque no me gusta lesionarme, me gusta estar con mi equipo, le he tomado un gran cariño al Marathón por cómo me han tratado, la directiva siento que me ha valorado, el profe "Tato", son muchas cosas, como han tratado a mi hijo y me da pesar no estar con ellos, agregó

“Por la anestesia duró unas dos o tres horas. Estoy muy agradecido con el doctor Benítez, lo llamamos a las 8 y media y se vino de su casa. Mis hijos lo quieren mucho, ya es una amistad de muchos años y muchas personas que se han preocupado y me han escrito, detalló el futbolista sobre la operación.

 

 

Acerca de su futuro con el equipo mencionó: Mi contrato termina, pero Dios sabrá. Yo este año con el equipo muy agradecido con las personas y lo que representa Marathón en mi vida, lo que venga será una bendición. Para mí esto es una prueba y agradecido, triste pero agradecido, con la frente en alto para tratar de recuperarme”.