Panamá venció a Costa Rica con un convincente 2-0 en el comienzo de la Liga de Naciones, gracias a los tantos de Ismael Díaz y Cecilio Waterman. A pesar del triunfo, el partido tuvo un sabor agridulce, tomando en cuenta que no se obtuvo el mismo resultado en la eliminatoria, sumado a ello, el poco público que asistió y, además, el estado de la grama del Estadio Rommel Fernández.

El primer tiempo de La Roja no fue el mejor en la era Thomas Christiansen por el bajo rendimiento mostrado y las pocas ocasiones creadas. Sin embargo, uno de los elementos que pudo haber influido, es la circunstancia en la que se encontraba el terreno de juego, algo de que los propios futbolistas y el entrenador puntualizaron.

"Intentamos encontrarnos en la primera parte, pero la cancha está en mal estado, hay que decirlo, no es excusa, es una realidad. En la segunda parte sacamos la personalidad, hicimos lo que hemos estado haciendo durante todo el año y nos ha funcionado, las jugadas arriba hay que pelearlas", manifestó Alberto Quintero.

"El estado de la cancha es muy difícil para nosotros, en la eliminatoria tuvimos una circulación rápida y hoy en el primer tiempo nos costó por este tema. Había que hacer dos o tres toques de más y por eso no salían las jugadas que queríamos", indicó Gabriel Torres

Otro de los jugadores que se refirió al tema fue Adalberto Carrasquilla"tiene mucha arena, mucha tierra, no tiene mucho césped, el balón bota feo, en los controles se crean dudas, la verdad es que no está en buen estado", dijo Coco.

Por su parte, previo al encuentro, Thomas Christiansen había recalcado el mal estado del escenario. "Hay un hongo que no se puede matar, lleva ahí un par de meses y no sé, no puedo hacer nada, tampoco soy jardinero del Rommel como para saber de esto. No entiendo que después de mucho tiempo sigamos teniendo problemas como este con expertos", expresó.