En medio de rumores y negociaciones, el Real Madrid se encuentra a punto de anunciar el fichaje de Jude Bellingham y, al mismo tiempo, continúa evaluando la posibilidad de incorporar al delantero del Tottenham, Harry Kane, como sustituto de Karim Benzema. Sin embargo, para que el experimentado atacante aterrice en LaLiga, la escuadra merengue contemplar ciertos aspectos.

Lo económico sin duda es el principal. El Real Madrid tiene límites: no está dispuesto a pagar 200 millones de euros por Harry Kane. La política de fichajes de la institución establece que el máximo coste sería de alrededor de 80 millones de euros. Aún esa cifra supone un gasto considerable e incluso un riesgo si en el corto plazo el británico y los madrileños separaran caminos.

La operación para fichar a Harry Kane antes de que termine la temporada es un tema prioritario para el Real Madrid. Sin embargo, no poder incluir los costes del fichaje en la presente temporada representa un desafío adicional. Más aún pensando en que ya se habrían invertido 103 millones en contratar a Jude Bellingham.

Mientras en Italia ya se habla de las primeras conversaciones entre Daniel Levy y Florentino Pérez, en España se revela la estrategia para llevar al delantero de los Spurs al Santiago Bernabéu. En los Lilywhites ya saben del interés que hay por Kane hasta dentro de la propia plantilla. “Si decide irse al Real Madrid vamos a estar tan contentos como él“, manifestó en las últimas horas el jugador Pedro Porro.

Aunque desde Valdebebas tienen otras opciones en el mercado, como Joselu del Espanyol o Rodrigo Moreno del Leeds United, la prioridad absoluta para suplir a Karim Benzema es Harry Kane. Es importante recordar que el contrato de Kane finaliza en el verano de 2024.