Cuando estaba empezando su carrera, Randall Azofeifa fue parte de la selección Costa Rica Sub 17 que jugó el Mundial juvenil del 2001 en Trinidad y Tobago. La Sele pasó a la segunda ronda en gran parte gracias a los dos goles que marcó en esa instancia el actual jugador de Herediano, marcó contra Irán y Paraguay. Después jugaría otras dos competiciones internacionales, pero con la mayor. Esas serían Alemania 2006 y Rusia 2018, donde no se logró superar la fase de grupos.

Luego de su primera participación en una Copa del Mundo (Trinidad y Tobago 2001), el centrocampista recibió sondeos de varios equipos europeos y entre esos estuvo el Barcelona. El futbolista de 30 años contó que lo llamaron del conjunto Culé con la intención de que con 16 años pasa al equipo filial.

“En ese momento surgió la posibilidad de ir al Barcelona, al segundo equipo, al Barcelona B, después de esa posibilidad estuvo la chance de ir a la Sampdoria, en algún momento de estar en Bélgica también se dio la oportunidad de ir al Twente porque el entrenador de nosotros pasó ahí”, declaró en una entrevista con ESPN.

Azofeifa aclaró que fue lo qué hizo que se caiga su pase: “En el Mundial sub- 17 del 2001 en Trinidad y Tobago salió una norma de FIFA que ningún jugador de menos de 18 años podía salir del país a menos que se comprobara que la familia tenía que trasladarse a ese país, eso nos cortó las alas a muchos jugadores”.

Cinco años más tarde, Randall tendría la oportunidad de jugar en el viejo continente y lo haría en el KAA Gent de Bélgica, en donde compartiría equipo con su compatriota Bryan Ruiz. Después tuvo buenos pasos por el Gençlerbirliği SK y el Kayseri Erciyesspor, ambos de Turquía.