El fútbol de Guatemala no está alejado de las polémicas y hace unos días nuevamente dio de qué hablar, cuando un jugador estuvo cerca de morir en un partido de la Primera División (Liga de Ascenso), esto a consecuencia de jugar un partido a altas temperaturas en una de las regiones del país chapín.
El colombiano Josué Ramírez Asprilla que milita para Quiché FC sufrió un golpe de calor el fin de semana, en el juego que se disputó en Coatepeque, siendo una de las áreas donde hay altas temperaturas y en la cual estuvo cerca de suceder una desgracia, pero afortunadamente el futbolista reaccionó bien.
Asprilla tuvo problemas de salud en la parte final del juego, quedó tendido en el césped y fue atendido por los bomberos que estaban en el estadio quienes inmediatamente le pusieron oxígeno, luego fue trasladado a los camerinos para seguirlo estabilizando y por último fue llevado a un hospital donde estuvo hasta estar fuera de peligro.
“Solo tengo que decir que Dios es bueno, pensé en muchos minutos que mi vida se iba a acabar, pero vi una luz llamada Dios y a mi hijo. Dios me puso esto como prueba para ser fuerte y establecer mi vida”, fue la publicación que hizo el sudamericano en su cuenta oficial de Facebook luego de pasar momentos de angustia.
Las ligas de Guatemala, incluida la mayor, ser caracteriza porque los equipos de zonas muy calurosas y la mayoría programa partidos al medio día, cuando la temperatura ronda los 35 grados centígrados como mínimo, algo que merma el espectáculo futbolístico, pero sobre todo atenta con la salud de los jugadores, árbitros y hasta aficionados, pero a pesar de eso no se han tomado medidas para cambiarlo.
