El Fútbol Club Motagua enfrentó en la noche del último miércoles a los Tigres de la UANL, en el marco de la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones de la Concacaf 2023 (torneo conocido usualmente como “Concachampions”). El duelo acabó con victoria por 1-0 de los mexicanos, algo que deja en suma desventaja a los catrachos de cara al desquite.
Lejos de escatimar en recursos para afrontar este compromiso, los auriazules visitaron Honduras con todo su arsenal. Diego Láinez y Guido Pizarro son algunas de sus grandes figuras, aunque puede que una se destaque por sobre las demás: el francés André-Pierre Gignac, que en su octava temporada con los universitarios ya es todo un ícono en la historia de la institución.
Partió como titular en el Olímpico Metropolitano de San Pedro Sula y salió de cambio al minuto 79, dejando buenas sensaciones. Tras el silbatazo final, fue uno de los que realizó el habitual cambio de camisetas, más aún teniendo en cuenta que la suya era de las más buscadas. ¿Quién fue el acreedor de la misma? El defensor Marcelo Pereira.
Durante el choque ya habían intercambiado palabras en múltiples ocasiones. “Yo le mostré respeto por lo que él es y luego me dijo algunas cosas que me causaron gracia. La camisa que llevo es la de él“, explicó el zaguero en diálogo con Diario Diez. Además, en relación al contenido de esas conversaciones, respondió: “Son cosas que quedan dentro del terreno“.
Finalmente, en cuanto a las posibilidades que tienen las águilas azules de avanzar a las semifinales, teniendo en cuenta que aún queda el duelo en Norteamérica y con un 0-1 en contra, aseveró: “No puedo dejar de creer hasta el último minuto y el árbitro diga que se ha acabado todo, esa es la esperanza que tenemos“.
