Corría el año 2014 y Costa Rica entera era un hervidero pues estaba clasificada al Mundial de Brasil, una de esas combinaciones futbolísticas que la vida otorga cada cierto tiempo y que beneficia en todo al deporte rey, no importa el ámbito o la categoría.
Para esa época, el torneo costarricense de fútbol se dividía en Verano e Invierno, y justamente un día como hoy pero de aquel año, se jugaba una de las finales más emotivas que se han vivido en Costa Rica en los recientes tiempos.
Hansell Arauz, anotador del único gol de la final Verano 20014 (Grupo Nación)
29 para cada uno
Saprissa y Alajuelense, los equipos más ganadores, más mediáticos y con más afición en el país, se peleaban la final del Verano 2014, pero aquel no era cualquier encuentro, no señores.Este era el partido que pondría fin a la interminable batalla por defiir quién era el mejor equipo de todo el país.
Ambos llegaban con 29 títulos en sus vitrinas y esta era la ocasión perfecta para por fin, desmarcarse del otro, una condición que no se veía desde muchos años atrás. Los manudos eran el equipo con mejor rendimiento durante los torneos recientes y por su parte, Saprissa acumulaba una racha de 7 torneos sin coronarse como campeón.
Fue una noche muy lluviosa, pero ni el agua ni el frío restó emociones a los protagonistas que llegaron decididos a llevarse la 30 para su institución, tampoco fue impedimento para que los aficionados (en su mayoría Saprisistas por ser locales) cantaran y gritaran en cada jugada del encuentro.
Pero todo cambió cuando al minuto 13, u n codazo de Jonathan McDonald provocó su expulsión y dejó a Alajuelense diezmado por lo que restaba del partido . Los morados tomaron control del juego y al 40´, por la banda izquierda, Heiner Mora colocó un centro al corazón del área donde Hansell Arauz se elevó en un enorme salto para conectar con cabeza un disparoimposible para el entonces portero manudo, Patrick Pemberton.
Hansell Arauz, exjugador del Saprissa (Saprissa)
El Ricardo Saprissa explotó y los cánticos se escuchaban aún más. La 30 finalmente tenía un serio pretendiente, aunque aún faltaban muchos minutos de juego. Fue así como poco a poco y con emociones en cada área, el reloj no detuvo su paso y lo que al inicio era solo ilusión, terminó por concretarse; Saprissa era el campeón Nacional de Costa Rica, era el primero en llegar a 30 y también se converrtía en el club con más títulos del país y del área.
Y lo que en ese momento fue una reñida competencia entre los clubes más grandes de Costa Rica, hoy es historia. Los manudos cayeron en un bache de títulos que los apartóde los morados, quienes sí continuaron por la senda ganadora y ahora poseen 36 trofeos en sus vitrinas, mientras que Alajuelense apenas consiguó su título 30 en 2020 y no ha podido sumar más.
Ocho años han pasado desde entonces, pero el recuerdo sigue vivo para los morados y por qué no, para algunos manudos.