La preocupación invadió a los fanáticos del Olimpia de Honduras cuando su capitán, Ever Alvarado, debió ser retirado del campo de juego ayudado por un médico, en el partido por la novena jornada del Clausura 2020 ante Marathon.

Si bien la acción que obligó su salida cuando apenas corrían 17 minutos no parecía ser de extrema gravedad, más allá de la forma en que se fue del verde césped, era díficil imaginar que en realidad había sufrido una ruptura del ligamento cruzado anterior.

Esta lesión, según precisó el médico Elmer López a DIEZ al tener los resultados de la resonancia magnética realizada al zaguero, le demandará al futbolista una recuperación de entre seis y nueve meses.

Por consecuente, el defensor merengue se perderá lo que resta de la temporada, así como los amistosos con la Selección de Honduras y el Final Four de la Liga de Naciones. Si su evolución responde acorde al plazo mínimo, podría volver en agosto. Caso radicalmente contrario, su retorno a las canchas estaría previsto para noviembre.