La historia de salvadoreños destacándose en la MLS tiene la misma antiguedad que la liga en sí. En 1995 se jugó el primer torneo de la Major League Soccer y ya en 1996 un cuscatleco hizo un golazo que terminó dándole el campeonato a Los Ángeles Galaxy. El autor del tanto se trata del histórico de Mauricio Cienfuegos, que jugó en el equipo estadounidense durante 7 años hasta su retiro.

El trascendental partido ocurrió en la final de la conferencia Oeste y fue entre los Galaxy y el Tampa Bay Mutiny. El marco de ese encuentro fue el Rose Bowl de la ciudad de Pasadena, California y hubo un público de 92,216 personas en las gradas. Fue un verdadero partidazo que estuvo parejo de principio a fin y que tuvieron que ir a la definición por penales australianos para determinar un campeón.

El Tampa arrancó ganando con gol de Giuseppe Galderisi, ni bien empezó el encuentro, y luego empataría Hurtado el marcado. El Pibe Valderrama terminaría asistiendo a Roy Lassister para que volverí a ponerlos arriba, pero a 5 del final y con pase de Cienfuegos, Robin Fraser pusó el 2 a 2 para que esto se extiende a la poco común tanda de definición que se usaba en ese momento en Estados Unidos.

A diferencia de como estamos acostumbrados de la definición por penales, en ese momento se definía todo de manera diferente. Los jugadores arrancaban casi desde mitad de cancha y tenían que definir en un mano a mano contra el arquero rival, sin chance de rebote. El tanto que le dio el triunfo a los Galaxy lo terminó marcando Cienfuegos desde afuera del área y dejando al arquero sin nada que hacer.

Ese tanto que marcó el legionario cuscatleco sentenció el encuentro y le dio a Los Ángeles su primer título de conferencia, llevándolos a la final contra DC United. Durante esa temporada, Cienfuegos fue el máximo goleador y asistidor, su rendimiento fue increíble y se vio reflejado en la ovación de todo un estadio que resaltó el rendimiento del salvadoreño en su primer año en Estados Unidos.