Las denuncias vinculan directamente al técnico Elmer Guidos, de quien se dice que ingresaba durante las concentraciones abusivamente a las habitaciones de las jugadoras y las intimidaría con gestos y comentarios.

El testimonio de una jugadora, citado por El Gráfico, cuenta por ejemplo que en su primer viaje con la Selecta la cambiaron de habitación sin explicación; luego el técnico Guidos y sus asistentes le preguntaron que cuál era su orientación sexual.

“Les dije que yo tenía claro lo que soy. Me sentí incómoda porque son cosas que no tienen por qué interesarles”, relató la futbolista cuyo nombre sigue en el anonimato.

La denuncia indica que al notar el DT cercanía de la jugadora con las que él consideraba homosexuales, él trataba de no despegarse de ella. “Me decían que él me cuidaba, que nunca lo había hecho con alguien más. Yo trataba de llevarme bien con todas, pero él siempre me preguntaba si me gustaban las niñas”, relata la mujer.

Pero lo peor habría ocurrido durante el Premundial, donde el equipo se alojó en varias casas diferentes, y al DT le correspondió casualmente la misma casa que le tocó a la jugadora en mención. Los episodios de supuesto acoso no tardarían en darse.

“Yo estaba en mi cuarto, él ni siquiera tocó la puerta. Se me quedó viendo y me preguntó ‘qué hace aquí tan solita’. La manera en que entró no me gustó, porque si yo hubiera estado desnuda o cambiándome, no me hubiera gustado que él entrara de repente”.

La futbolista en mención renunció a La Selecta. Su paso por el equipo lo califica como bonito a nivel deportivo. Sin embargo, afirma: “El cuerpo técnico no me dejó una buena experiencia, me hacían pasar momentos incómodos”, explica.

“Un día me llamó a su habitación en la federación, fue de noche, para decirme lo mismo. Yo ya le había aclarado (que era heterosexual), pero me decía que había visto que algunas jugadoras andaban detrás de mí. Yo ya estaba harta”.

Guidos desmintió esta clase de acusaciones señalando que “siempre que hacemos reunión las hacemos en el gimnasio, todo el grupo completo, los profesores y ellas. Si mandamos a llamar a alguien en particular, estamos todos. Es una difamación”, puntualizó.

También dijo que en la concentración del equipo se tomó la decisión de que cada miembro del cuerpo técnico se quedara en una casa con varias jugadoras, esto para evitar posibles fugas y desórdenes.