Hasta hace unos días, el futuro de Luis Garrido en Córdoba estaba completamente descartado y se habla de una posible llegada a Motagua. El gerente deportivo del equipo español había confirmado que el catracho estaba en la lista de jugadores que no tendrían en cuenta, pese a que tanía contrato vigente hasta diciembre de este año. Sumó solo 46 minutos con el balón y no la pandemia lo privó de seguir teniendo oportuniades.

Pero en estas últimas horas salió hablar el representante y se echó todo para atrás. Paulo Hernández contó que todavía pertenece al club de la tercera división de España: “Él tiene contrato un año más con Córdoba, si ellos deciden no contar con él, hay que llegar a un arreglo. Luis pues él tiene contrato, intentar ganarse su sitio en el Córdoba. Si hay un futbolista al cual yo destacaría en toda mi carrera es Luis, la fuerza de voluntad que tiene y con lo que ha pasado y ha superado”.

Y aclaró el motivo por el cuál Garrido no pudo contar con varios minutos desde que llegó a principio de este año: “El contrato que se firmó en Córdoba era un contrato muy interesante, Córdoba en circunstancias normales debería estar luchando por ascender a primera división. Llega, juega y el técnico que lo trae se marcha, luego llega otro”.

 

 

Sin dejar la polémica de lado, contestó sobre los rumores que lo ubican en las Águilas Azulez para el inicio de la nueva temporada en Honduras: “No sabría si Motagua u otro equipo, lo que sí es que se merece todo lo bueno. Todo pasa en el planteamiento que nos haga el Córdoba con el año de contrato que le queda y si es satisfactorio pues decidiremos. Si no encaja pues nada, él tiene un contrato”.

El futero de Garrido no está para nada confirmado y, pese a los dichos del gerente deportivo de su club actual, no se sabe si va o continúa hasta terminar el contrato. El agente de él está confiado en poder cambiarle la decisión a los directivos del Córdoba, pero el futbolista ya habla de su futuro lejos en su país de origen. El gran problema es lo económico y la crisis en la que están sumergidos los equipos catrachos.