Las heridas alrededor del primer juego de la final parecen ser profundas están lejos de sanar para el Club Sport Herediano; la derrota tiene profundamente molestos a los florenses luego del 2 por 0 que recibieron en casa del Saprissa.
Y es que el tema deportivo no ha sido lo único que ha salido a flote en el Team tras el dolor de la derrota el domingo anterior, las reacciones de la dirigencia han sido poco más que polémicas, donde no solo hablan del arbitraje, sino también se han empeñado en recriminar la labor de la televisora que hizo la transmisión.
Juan Carlos Retana, presidente del Herediano señaló que la Comisión Disciplinaria siempre le ayuda al Saprissa (Foto: mariosegura.com)
¿Ayudas para el Saprissa?
El presidente del Herediano, Juan Carlos Retana, atendía a la prensa tras el final del partido y con visible molestia por el resultado, respondía una a una las preguntas. Una de ellas buscaba su opinión sobre la apelacion del Saprissa respecto al castigo de su arquero Aarón Cruz.
“Eso es un problema del Saprissa que es el que necesita a Aarón Cruz y de la Comisión Disciplinaria que siempre les ha ayudado, es un problema a lo interno…” respondió el jerarca rojiamarillo sin ningún miramiento.
Con estas declaraciones, se encendió todo tipo de polémica en redes sociales y en medios de comunicación; “el dardo” de Retana dejó en mal al arbitraje de Costa Rica y dejó ver el sentir de lacúpula florense con respecto a este tema.
Aarón Cruz purga un castigo de 4 fechas por lanzarle hidratante a un aficionado al final del juego de vuelta de la Final de Segunda Fase, una sanción que el conjunto morado apeló y espera sea revocada, de momento no ha habido una resolución sobre el tema.
Del lado florense, Jafet Soto, Juan Carlos Retana y Aquil Alí, todos miembros de Fuerza Herediana, salieron a dar declaraciones,en todas ellas, sus mensajes fueron desafiantes, polémicos y controversiales y en poco o nada se refirireon a lo deportivo.
Este sábado se jugará elpartido de vuelta de la Gran Final, en el estadio Colleya Fonseca, sede de los florenses, donde confían en revertir el marcador y levantar la 30.