A la Selección de Panamá le esperan tres meses decisivos. A partir del 4 de septiembre, cuando se enfrente a Surinam, iniciará su camino en la última ronda de las Eliminatorias. Y en noviembre, si se queda con el primer lugar del Grupo A, podría tener ya en mano el ansiado boleto al Mundial 2026.
Por este motivo, es fundamental para Thomas Christiansen que todos los seleccionados lleguen a punto y no se repita lo sucedido en la última Copa Oro, donde las bajas mermaron a un plantel que terminó sufriendo una dura eliminación en los cuartos de final a manos de Honduras.
Adalberto Carrasquilla, por ejemplo, atraviesa un momento excelso en Pumas. José Fajardo, al igual que Cecilio Waterman, superó su lesión y anotó un gol en su regreso con Aucas. Ismael Díaz dio el salto a Club León. “Fulo” Martínez suena en España. Y otras figuras, como Fidel Escobar, Michael Murillo, Orlando Mosquera o José Luis Rodríguez, siguen sumando minutos en sus clubes.
Panamá recibe un duro golpe desde Europa camino al Mundial 2026
Muy diferente es la situación de uno de los futbolistas en los que Christiansen confía: Eduardo Guerrero. El centrodelantero de 20 años fue perdiendo lugar en su equipo, Dinamo de Kiev de Ucrania, a finales de la temporada pasada. Y después de su participación en la Copa Oro, la situación se agravó.

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Guerrero no sumó ni un solo minuto en la pretemporada ni en los tres partidos que diputó el equipo europeo en la fase previa de la Champions League. El motivo se desconoce, pero podría haber pesado su desempeño: el gol que anotó en el triunfo 5-2 sobre Guadalupe, igualó su escueto registro con el equipo europeo en veintiséis partidos entre Liga Premier, Copa de Ucrania y Europa League.
Ahora, está en manos del panameño-dominicano volver a ganarse la confianza del técnico e ídolo de la institución de Kiev, Oleksandr Shovkovski, para volver a la Marea Roja en la fecha FIFA de septiembre. Pero no será para nada fácil, pues pelea palmo a palmo por un lugar con otro atacante que está encendido y viene dando de qué hablar, Tomás Rodríguez.