Por si la cancelación de la Ligue 1 a raíz del coronavirus COVID-19, que podría evitar un nuevo título, no fuera motivo suficiente de frustración para el PSG, ahora ha trascendido la noticia de que su presidente, Nasser Al-Khelaifi, deberá someterse a un juicio en septiembre por corrupción.
En específico, será juzgado por la ley en Suiza, en el marco de una atribución cuestionable de los derechos televisivos de los Mundiales de 2026 y 2030. Esto lo atañe debido a que también oficia como gerente del grupo beIN Media, así como involucra a Jerome Valcke, ex secretario general de la FIFA.
Según detalló el portal Everardo Herrera, están imputados por “instigación a la gestión desleal, falsificación de documentos y corrupción pasiva“. La acusación de la fiscalía radicaen una presunta incitación por parte deAl-Khelaiïi a Valcke, para cometer una mala administración criminal agravaday obtener así la concesión de los derechos televisivos.
A su vez, Valcke habría aceptado sobornosde “varios cargos de mala administración criminal agravada y de falsificación de documentos”, así como una lujosa villa en Cerdeña. Cabe destacar que el principal mandatario de la entidad gala negó rotundamente haber incurrido en estos actos.
Finalmente, hay también un tercer apuntado, aunque su nombre no ha trascendido. Se trata de un hombre de negocios experto en derecho deportivo, quien habría alentado al ex funcionario de la FIFA para que se desempeñe deslealmente.
