El gol fantasma que terminó significando la clasificación canalera al Mundial y la eliminación de Estados Unidos ha generado una gran polémica en Concacaf que podría derivar en que el partido tenga que repetirse.
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La suerte de tres seleccionados de Concacaf podría cambiar considerablemente si FIFA decide analizar en profundidad lo sucedido en el partido entre Panamá y Costa Rica, en el que los locales sellaron su boleto directo a Rusia.
Cuando los ticos se imponían 1-0, el árbitro del encuentro decidió convalidar un gol que ni los propios futbolistas panameños se habían animado a celebrar, ya que el balón estuvo muy lejos de cruzar la línea de meta. El encuentro terminaría con triunfo 2-1 para los locales y sentenció la eliminación de Estados Unidos, que cayó por el mismo marcador ante Trinidad y Tobago.
Sin embargo, hay en Concacaf dos interesados en que el partido vuelva a disputarse: Estados Unidos, que se jugará una última carta antes de resignarse a quedarse sin Mundial; y Honduras, que incluso si Panamá hubiera empatado se habría clasificado de manera directa a Rusia.
El ajustado calendario de competencia fue siempre un impedimento para dar cauce a la repetición de un partido. Pero FIFA ha sentado antecedente en África, con el juego entre Sudáfrica y Senegal, y desde entonces se ha incrementado la tendencia a este reclamo.
“La FIFA tendría que hacer que se repitiera el partido. Es más, debería obligar a que se jugara de nuevo. Ya hay precedentes al respecto”, expresó al diario Marca el exárbitro español Rafa Guerrero.
