La Selección de Costa Rica ya se encuentra en Dallas, preparándose para su próximo partido contra México, y ha descubierto que su enemigo silencioso en esta ocasión no es solamente la crisis futbolística. El equipo costarricense tuvo su primer entrenamiento en la cancha 8 del Toyota Center, proporcionada por Concacaf.
Ahí descubrieron que el verdadero problema es el agobiante calor del sur de Estados Unidos. Han experimentado una ola de temperaturas intensas en el último mes, con temperaturas que superan los 38 grados centígrados. Este clima extremo se espera que se mantenga durante los próximos días en Texas.
Los jugadores de Costa Rica se encontraron con un ambiente sofocante mientras se preparaban para el importante partido. Ellos son conscientes de este desafío, y se prepararon para hacer frente al calor extremo. Antes de comenzar la práctica, un pequeño camión llegó con una considerable cantidad de líquidos hidratantes destinados al equipo.
Los miembros del equipo de utilería de la Fedefútbol confirmaron que se ha duplicado la hidratación para hacer frente a estas condiciones adversas. Se han dispuesto 120 botellas de bebida hidratante, además del suministro de agua proporcionado por Concacaf. Además, los entrenamientos de la selección se llevan a cabo por la mañana, a partir de las 8:30 a.m. En ese momento, la temperatura ronda los 28 grados centígrados.
Sin embargo, se espera que las temperaturas superen los 30 grados durante la tarde, según informes del Weather Channel. La Sele está adaptando su rutina para evitar los momentos más calurosos del día. Mañana, realizarán un reconocimiento del campo de juego del AT&T Stadium, el cual también será sede de la otra serie de cuartos de final entre Qatar y El Salvador.
