Cada vez faltan menos años, menos meses, menos días, menos horas para la Copa Mundial de Fútbol de la FIFA, que se celebrará a fines de 2022 en Qatar. La cita contemplará varias novedades y aspectos curiosos: será el primero en el Mundo Árabe, en el país de menor extensión y el único hasta la fecha que se desarrollará en el invierno del hemisferio norte.

Su incursión en el deporte rey es cada vez más importante, llegando incluso a afianzarse como sede del Mundial de Clubes en 2019, del cual participó el Al-Sadd dirigido por Xavi (superó la ronda preliminar ante el campeón oceánico, el Hienghene Sport de Nueva Caledonia, aunque cayó en cuartos de final contra el de Concacaf, el Monterrey).

Costa Rica cuenta con un destacado jugador que supo militar en aquel país: Christian Bolaños. El ex Saprissa, que tuvo un paso efímero por el Al-Gharafa, dialogó con ESPN Digital al respecto y explicó: "Son cosas impresionantes las que se viven allá, dentro y fuera del estadio". A su vez, recordó: "Ellos son muy respetuosos, en su momento no iba mucha gente al estadio, es una particularidad que tienen".

En cuanto al torneo doméstico, rememoró: "Se juega por las noches por lo que es residir en este desierto, y el calor que hace dependiendo de la época". A su vez, en torno al Mundial, indicó: "Cuando estaba allá ya estaban tres estadios listos. Se va a jugar en el medio día y es un contraste: afuera estaba a 48 grados centígrados, y entramos al estadio y estaba a 21 grados o 18".

Finalmente, reconoció que Qatar tiene varios factores ideales para albergar la Copa del Mundo: "Todo se concentra en Doha, la capital. Eso va a ser muy provechoso para las selecciones, van a tener ese factor a favor porque la distancia mayor entre estadios puede ser de 40 minutos".