Varias ligas alrededor del mundo fueron suspendidas por el coronavirus, mientras que algunas otras seguirán su rumbo, aunque con los encuentros a puertas cerradas, a fin de mermar la propagación del agente infeccioso.
En Centroamérica ya se han tomado cartas en el asunto. Panamá y Costa Rica han tomado la primera opción mencionada, mientras que la Concachampions tampoco se disputará hasta nuevo aviso.
Hugo Carrillo, presidente de la Federación Salvadoreña de Fútbol (Fesfut), brindó una conferencia de prensa esta tarde, para anunciar las medidas que se llevarán a cabo en torno al COVID-19.
Primeramente, en cuanto a las disposiciones que promulgó el presidente de postergar toda actividad deportiva, indicó: "Vamos a sostener una reunión importante mañana con la gente de la primera división, a fin de buscar una logística que pueda contrarrestar los efectos que esta decisión de suspensión de los partidos conlleva".
En esa misma línea, explicó que se bajaran tres posibilidades para el futuro próximo de la primera división: "Las opciones son parar el torneo mientras dure la cuarentena, jugar con menos de 500 aficionados o jugar a puerta cerrada".
En cuanto a los partidos contra Belice y Panamá, avisaron: "Por el momento se mantienen los dos partidos programados este mes en fecha FIFA". Aún así, sostuvieron que "anunciaremos que se realizarán a puerta cerrada". Todo ello, añadieron, "cambiará si al final los países antes mencionados determinan la prohibición en salir de sus jugadores", por lo que existe la posibilidad de un cambio de sede.
