Ayer por la tarde, el entrenador Fabián Coito presentó la convocatoria del primer microciclo de trabajo de la selección sub 23 de Honduras, que buscará clasificarse a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
En ella aparecen algunos jugadores que apuntan a ser lo más importante del fútbol hondureño dentro de muy pocos años, y que ciertamente tienen un potencial que ha ilusionado mucho a los aficionados de la "H".
Como referentes de la camada figuran Denil Maldonado y Rigoberto Rivas, de los pocos seleccionables que militan en el extranjero. Maldonado recién fichó por el Pachuca mexicano, mientras que Rivas juega en la Reggina de la Serie C de Italia.
Por estar con sus respectivos equipos, ninguno de los dos figura en la lista recién brindada, pero seguramente estarán en el torneo Preolímpico. De ahí en adelante, se destaca Darixon Vuelto, delantero titular con el Real España, y de gran recorrido en selecciones juveniles.
Se le suman elementos como Carlos Pineda, mediocampista central técnica que que ya se destaca en el Olimpia y la selección mayor. Por otro lado, aparece Wisdom Quayé como lateral izquierdo.
De padre ghanés y madre hondureña, Quayé es titular en el Vida de la Ceiba que marcha puntero del campeonato local, y se ha destacado por su velocidad y buen manejo de pelota.
La lista se completa con otros elementos como Douglas Martínez, centro delantero del Real Salt Lake de la MLS, y goleador en la USL con el equipo filial.
También habrá que poner atención a José Alejandro Reyes; en Olimpia ha perdido continuidad, pero fue uno de los jugadores más destacádos en los Panamericanos de Lima, donde la "H" ganó medalla de plata.
Por último, también suenan los nombres de Jorge Álvarez, José Pinto, y Kervin Arriaga, que se han destacado en Olimpia y Marathón, respectivamente, y que estarán peleando por un puesto para meterse en el listado final de convocados.
