En un emotivo encuentro, que contó con el salvadoreño Iván Barton como árbitro principal, Japón dio la segunda sorpresa del Mundial de Qatar 2022 al imponerse 2-1 a Alemania en el Estadio Khalifa. Los Nipones sin dudas serán un duro rival en el Grupo E, por lo que ahora la presión recae en Costa Rica y España, que se medirán a partir de las 10:00 a.m.

 

Con su característico juego asociativo, el conjunto de Hansi Flick erosionó con el correr de los minutos la disciplina táctica de los Samuráis Azules, que con su presión generaron incomodidad principalmente en el inicio del juego —es más, tras un contragolpe, Maeda adelantó a Japón al minuto 7 conectando un envío desde la derecha, pero estaba en fuera de juego—.

Así, tras algunos avisos con remates de Rüdiger, Kimmich y Gündogan, llegó la jugada que lo cambió todo: el propio futbolista del Bayern Múnich detectó la subida del lateral por el carril izquierdo y lo asistió, dejándolo mano a mano debido al pésimo marcaje de la defensa japonesa. Gonda lo terminó derribando y Barton pitó el penal que Ilkay Gündogan (33') cambió por gol.

Luego de este tanto, los pupilos de Hajime Moriyasu intentaron reaccionar. Postura que se vio cercenada por el dominio apabullante de los germanos, el cual se cristalizó en una segunda diana, obra de Kai Havertz. Empero, fue sancionada a instancias del VAR debido a que el atacante del Chelsea estaba en fuera de juego.

Y el inicio del segundo tuvo un inicio emocionante, Gnabry estrelló su tiro en el travesaño; Kamada respondió con un disparo que desvió Sülle y Musiala retrucó con una muestra de toda su habilidad en el área, rematando por encima del travesaño. Ambas selecciones generaron más ocasiones en un juego que se tornó de golpe por golpe.

Neuer y Gonda se lucieron con una seguidilla de atajadas, pero los Nipones se asentaron e igualaron las acciones gracias a un sensacional desborde de Mitoma: el guardameta del Bayern cortó su potente centro rasante y el rebote le quedó servido a Ritsu Dōan (75'), quien no perdonó. Los cambios le surtieron efecto a Moriyasu.

Algo que corroboró instantes después Takuma Asano (83'), picando en profundidad ante un preciso envío en largo de Itakura. Süle lo habilitó y el atacante del Bochum, gracias a un control exquisito que le permitió sacarle ventaja a Schlotterbeck, se fue mano a mano con Neuer, fusilándolo a posteriori para firmar una histórica remontada de Japón.