La noche del 18 de noviembre, la Selección de Costa Rica empató 0-0 ante Honduras en el Clásico Centroamericano y firmó su eliminación de la Copa del Mundo de Norteamérica 2026.

Ante este fracaso rotundo que sacudió al fútbol nacional, a la Federación Costarricense de Fútbol (Fedefútbol), presidida por Osael Maroto, no le quedó otra opción que tomar decisiones drásticas para iniciar un proceso de reestructuración con miras al 2030.

Hasta ahora, las víctimas de esta depuración son dos: el ex entrenador Miguel “Piojo” Herrera, que fue la salida más inmediata, y su compatriota Ignacio Hierro, quien fungía como director de selecciones y cuyo despido se confirmó en los últimos días.

Piojo Herrera no tardó en acordar su finiquito tras el fracaso de La Sele (FCRF).

Piojo Herrera critica sin filtros a la Fedefútbol

Ahora, exactamente un mes después de aquel empate infame que selló la eliminación tricolor, el Piojo Herrera reapareció desde tierras mexicanas para criticar sin filtro a la cúpula del fútbol tico. Pero no fue su despido lo que cuestionó (por el contrario, lo acató sin poner excusas), sino la salida de “Nacho” Hierro.

Me da pena que hoy tomen una decisión tonta, y digo tonta porque el Comité ha venido tomando buenas decisiones. Pero esta es mala y tonta, porque Nacho Hierro organizó muy bien la estructura de la Federación Costarricense de Fútbol”, disparó el estratega en declaraciones para el programa Jorge Ramos y su Banda.

Ignacio Hierro no está más en la Federación (Kevin Jiménez).

Clasificó a la U-17 a un Mundial, algo que no pasaba desde hace mucho tiempo. Dejó a la U-20 con un gran equipo para pelear por todo en el siguiente Mundial. Todo lo que estaba bajo su organización era muy bueno”, añadió el Piojo, actualmente sin equipo.

Más allá de la defensa del Piojo Herrera a su compatriota, y aunque es cierto que el cargo de director de selecciones debe evaluarse por muchas más cosas que la clasificación mundialista, lo cierto es que el peso del fracaso dentro de la Fedefútbol y los constantes señalamientos de la afición terminaron haciendo insostenible la continuidad de Ignacio Hierro.