Los últimos días no han sido nada sencillos para Keylor Navas. El arquero costarricense comenzó a recibir sus primeras críticas desde que se puso los guantes como jugador de los Pumas de la UNAM, luego de una noche para el olvido en el duelo frente al Atlanta United por la segunda jornada de la Leagues Cup.
Si bien el marcador final fue 3-2 para los felinos, el histórico arquero tico quedó en el centro de las críticas por dos jugadas puntuales: un autogol en el primer tiempo y una expulsión al minuto 95 por una fuerte entrada para evitar un mano a mano rival en la puerta del área. La situación obligó al lateral Álvaro Angulo a ponerse los guantes para defender los últimos minutos del partido.
El reconocimiento que Keylor Navas estaba esperando
Mientras Pumas prepara el exigente choque de mañana ante el Inter Miami y Keylor cumple su sanción, desde Europa llegó un guiño que el costarricense estaba esperando.
La cuenta oficial de la UEFA Champions League en redes sociales compartió cuatro imágenes de su presentación en el Real Madrid, junto al mensaje: “Tal día como hoy en 2014… Keylor Navas era presentado en el Bernabéu”.
El propio Keylor no dejó pasar esta fecha tan especial, y a través de su cuenta de Instagram, compartió un video conmemorativo de su llegada al gigante español, ocurrida hace exactamente 11 años.
En el clip se escucha su frase “Pura vida y hala Madrid”, acompañada de un montaje con sus mejores momentos en el club merengue, incluyendo las tres Champions League consecutivas conquistadas junto a Cristiano Ronaldo, Sergio Ramos y compañía.
De Brasil al Bernabéu
La llegada de Keylor Navas al Real Madrid se produjo después de su brillante actuación en el Mundial de Brasil 2014, torneo en el que Costa Rica sorprendió al mundo llegando a los cuartos de final.
El guardameta, proveniente del Levante UD, fue presentado en el palco de honor del Santiago Bernabéu junto a su familia, luciendo el dorsal número 13. Tras el acto protocolario, saltó al césped merengue para saludar a miles de aficionados que le dieron la bienvenida con una ovación. Hoy, más de una década después, Keylor sigue evocando aquellos días de gloria.