Este miércoles 3 de diciembre, Liga Deportiva Alajuelense se jugará ante Xelajú MC el título de la Copa Centroamericana 2025. Sin embargo, después de lo sucedido en la ida, los manudos aún no tienen claro quién será el encargado de ejecutar una pena máxima si el árbitro Nelson Salgado llega a sancionar una.

Y es que, en el encuentro disputado la semana pasada ante un Alejandro Morera Soto repleto, la Liga vivió un episodio totalmente fuera de lo común: falló dos penales en los 90 minutos.

Noche negra para los referentes

El primero lo cobró Joel Campbell, casi siempre una garantía desde los doce pasos, y el segundo Celso Borges, otro especialista con amplia experiencia. Pero ambas ejecuciones fueron frustradas por el arquero uruguayo Rubén Darío Silva, figura absoluta de los Chivos en la ida.

Desde entonces, quedó en el aire la duda de si el capitán rojinegro, con 37 años, se siente en condiciones de volver a asumir semejante responsabilidad en la final de vuelta, donde además tendrá a la afición chapina encima.

¿Celso volvería a patear un penal?

Pero Celso Borges no evade sus obligaciones como referente manudo. En declaraciones a Columbia Deportiva, el tres veces mundialista fue tajante: “He pateado muchos penales en mi vida. He fallado como todo ser humano, pero si hay que ponerse otra vez, uno se pone y para eso practicamos. Errar es parte del fútbol, uno no quiere nunca”.

Además, se sinceró acerca de lo que significa fallar desde los once metros: “No hay peor insatisfacción que cuando uno erra un penal. Se va a la casa con un desazón terrible, pero el equipo a uno lo acuerpa, y por dicha eso no afectó de una manera tan trágica el resultado”.

Las estadísticas ayudan a dimensionar lo ocurrido. Celso Borges ha convertido 17 penales a lo largo de su carrera, y el que le atajó Rubén Silva en la final de ida es apenas el quinto que no consigue concretar. Este miércoles, en el Estadio Cementos Progreso de la Ciudad de Guatemala, podría tener su revancha si la historia vuelve a ofrecerle la oportunidad.