Desde hace muchos años, por no decir desde siempre, las estructuras del fútbol panameño han sido malas o inexistentes.
Después de la histórica clasificación por primera vez a una Copa del Mundo, muchos pensaban que ese sería el punto de partida para empezar a construir un fútbol en vías de desarrollo, pero no fue el caso.
El fútbol base del país dista de ser ejemplar; la infraestructura en campos de juego, entrenamiento, y estadios, tampoco, y a nivel dirigencial no parece haber ninguna respuesta en el horizonte.
Es por eso que la Asociación de Futbolistas de Panamá (AFUTPA) ha convocado una marcha hasta la presidencia de la República, exigiendo una “ley que fomente el desarrollo del fútbol como industria y formalice el estatus laboral de nuestra profesión”, según indicó el comunicado.
A la convocatoria se han unido distintas figuras del balompié canalero como Blas Pérez, Román Torres, y José Calderón, entre otros, con la esperanza de tener una respuesta resolutiva de parte del presidenteLaurentino Cortizo.