La Copa Oro 2021 dio comienzo este último sábado con el encuentro entre México y Trinidad y Tobago que acabó en 0-0. Ante la falta de goles, los flashes se los llevó la sangrienta lesión del “Chuky” Lozano, así como también la reiteración del ya conocido grito homofóbico que prolifera la afición azteca.
La federación de aquel país ya ha recibido en reiteradas oportunidades advertencias por este incidente, el cual está colmando la paciencia en Concacaf y podría tener consecuencias muy graves en un futuro próximo para los norteamericanos, si es que su público no cesa con ese accionar.
Yon de Luisa, presidente de la FMF (entidad que regula el balompié mejicano), precisó que la casa madre del fútbol de la región podría llegar a impedirles llevar público a su próximo duelo ante Guatemala, a modo de sanción. “Se nos preguntaba el día de ayer si había la posibilidad de jugar a puerta cerrada el próximo miércoles“, señaló.
“Entendemos que esta es una de las opciones que está revisando la Concacaf, pero oficialmente al día de hoy no tenemos nada“, continuó el mandamás, a la vez que agregó sobre el origen de la discordia: “Ojalá que para próximos partidos se den cuenta los hinchas de que no nos lleva a nada bueno“.
“Condenamos el grito en su totalidad, condenamos lo que pasó en Dallas contra Trinidad y Tobago, trabajaremos de cerca con la Concacaf para que puedan implementar todas las actividades que hicimos“, completó de Luisa.
