La Selección de Panamá continúa con su preparación para el crucial duelo del martes ante Surinam, correspondiente a la cuarta jornada de las Eliminatorias Mundialistas de la Concacaf, aunque las últimas horas no han sido del todo positivas para el equipo dirigido por Thomas Christiansen. Tras el histórico triunfo 1-0 ante El Salvador en el Cuscatlán, que revivió las esperanzas de clasificación, los panameños ahora enfrentan dos contratiempos que podrían complicar su planificación.
El primero de ellos está relacionado con los trabajos en la gramilla del estadio Rommel Fernández, que han impedido que la selección pueda entrenar en su escenario habitual. Desde el sábado, los canaleros han tenido que trasladar sus prácticas al Centro de Alto Rendimiento, mientras se concluyen las labores de mantenimiento al césped del coloso panameño, sede del partido ante los surinameses.
A este inconveniente se sumó una noticia más preocupante: la baja confirmada de José Córdoba, uno de los jugadores más importantes del esquema defensivo de Christiansen. El zaguero no logró recuperarse de una lesión en los isquiotibiales, la cual lo mantenía en duda desde hace varios días. Tras ser sometido a una última evaluación médica, se determinó que no está en condiciones para disputar el encuentro y fue desafectado oficialmente de la convocatoria.
El técnico Thomas Christiansen lamentó la ausencia de Córdoba, pero decidió no realizar un nuevo llamado, optando por mantener su nómina de 23 futbolistas. Según fuentes cercanas al cuerpo técnico, el estratega prefiere trabajar con el grupo actual para conservar la cohesión y el ritmo de trabajo a tan poco tiempo del partido.
Panamá en busca del liderato
La Selección de Panamá buscará este martes 14 de octubre a las 19:00 horas su segunda victoria consecutiva en el estadio Rommel Fernández, donde recibirá a una motivada Surinam que llega igualada en puntos y con el mismo objetivo: escalar al primer lugar del Grupo A. El encuentro promete ser intenso y determinante en la lucha por uno de los boletos al Mundial 2026.
A pesar de las dificultades, el combinado canalero confía en el respaldo de su afición, que agotó todas las entradas para el compromiso. Los panameños esperan convertir el Rommel Fernández en una auténtica fortaleza y mantener viva la ilusión de regresar a una Copa del Mundo.