La Selección de Nicaragua afrontará este martes su último partido de la Eliminatoria de Concacaf rumbo al Mundial 2026, un camino que ya no le permite soñar con la clasificación. Sin embargo, el equipo dirigido por Marco Antonio “El Fantasma” Figueroa busca cerrar con carácter cuando visite a Haití en Curazao, decidido a dejar una buena imagen pese a estar eliminado.
Figueroa, quien ya sorprendió en la jornada anterior al vencer a Honduras y complicarle el camino mundialista, aseguró que su equipo quiere convertirse en el “caballo negro” de estas últimas fechas. El estratega chileno insistió en que Nicaragua competirá con la misma intensidad, consciente de que podría influir indirectamente en las aspiraciones de selecciones como Costa Rica y la H.
Cambios en la convocatoria de Nicaragua
Antes de emprender el viaje, el técnico sorprendió nuevamente al anunciar cambios en la convocatoria, decisión que levantó alertas en el entorno de los equipos que luchan por el boleto mundialista. Figueroa dejó fuera a Jorge García Hurtado y Steven Cáceres, movimientos que generaron conversación en la región por la cercanía del cierre del grupo.
Sus lugares fueron ocupados por Óscar Acevedo y Cristian Reyes, quienes se integraron rápidamente a los entrenamientos y formarán parte de la delegación que viajará al Caribe. Con estos ajustes, Figueroa apuesta por refrescar la plantilla y dar oportunidad a jugadores que pueden aportar energía en el cierre del proceso.
Nicaragua ocupa actualmente la cuarta posición del Grupo C, con opciones únicamente de alcanzar el tercer lugar, y eso solo si Costa Rica pierde su partido. Aun así, el objetivo de los pinoleros no pasa por las matemáticas, sino por finalizar la eliminatoria con una actuación que dignifique el esfuerzo realizado.
El duelo ante Haití será el último capítulo de un ciclo en el que Nicaragua mostró momentos de competitividad, especialmente ante rivales de mayor jerarquía. Ahora, con la aspiración de cerrar con buen pie, la Azul y Blanco intentará despedirse dejando claro que, aunque no clasificó, compitió con determinación y sin regalar nada.
