Municipal completó este viernes su última sesión de trabajo en el Centro Deportivo Ernesto Villa, antes de emprender el viaje hacia Jutiapa, donde enfrentará a Atlético Mictlán en el partido de Ida de los Cuartos de Final. Aunque el cuerpo técnico, encabezado por Mario Acevedo y Dwight Pezzarossi, aún no confirmó oficialmente la lista de convocados, se conoció que el equipo no podrá contar con uno de sus jugadores clave bajo los tres postes.

El portero Kenderson Navarro no realizó el viaje hacia Asunción Mita, debido a que continúa recuperándose de una lesión que lo dejó fuera de acción desde la jornada anterior. Navarro sufrió un desgarre muscular en el duelo frente al Deportivo Marquense, y aunque su evolución ha sido positiva, no está en condiciones de afrontar un compromiso tan exigente como el inicio de la fase final del torneo.

La situación del guardameta sigue siendo incierta incluso para el choque de Vuelta, programado para el próximo miércoles. La participación de Navarro dependerá estrictamente de cómo responda su cuerpo en los próximos días, por lo que el cuerpo médico mantiene un seguimiento cercano a su recuperación.

El sustituto de Kenderson Navarro en Municipal

Ante esta baja, todo apunta a que Braulio Linares será nuevamente el responsable de custodiar el arco escarlata. Linares ya tuvo protagonismo durante gran parte de la Fase de Clasificación, donde cumplió con solvencia en varios encuentros y aportó seguridad en momentos clave. Su experiencia reciente será fundamental para tratar de mantener el orden defensivo del equipo.

El duelo entre Mictlán y Municipal se disputará este sábado a las 15:00 horas en el estadio La Asunción, un escenario siempre complicado para los rivales. Los rojos buscan un resultado favorable que les permita llegar con ventaja al partido de Vuelta en el estadio El Trébol, donde esperan cerrar la serie ante su afición.

Con la ausencia de Navarro y la presión propia de los cuartos de final, Municipal afronta un reto que pondrá a prueba su profundidad de plantel y su capacidad para adaptarse en momentos decisivos. La misión es clara: dar el primer golpe en territorio miteco y encaminarse hacia la pelea por el título del torneo.