La Liga Deportiva Alajuelense aprovechó al máximo el último día del mercado de fichajes costarricense. El jueves 18 de septiembre, en las horas finales de la ventana de transferencias, los manudos dieron la sorpresa al llevarse a una joven promesa del Municipal Liberia.

Se trata de Giankarlo Romulus Gómez, defensor de 19 años que tenía todo prácticamente cerrado para firmar su primer contrato profesional con los Coyotes, pero que terminó inclinándose por Alajuela tras recibir una mejor oferta.

Giankarlo Romulus, el Lamine Yamal de la Liga Promérica

Romulus, quien se incorporará al Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Turrúcares, nació el 12 de julio del 2006 en Elkton, Maryland, Estados Unidos, país en el que se conocieron sus padres y vivió hasta los 10 años.

Su papá es haitiano; su mamá, guanacasteca. Cuando se mudó a Costa Rica para vivir con ella ya traía la pasión por el fútbol, deporte que había empezado a practicar en Estados Unidos y que con el tiempo se convirtió en su principal objetivo de vida.

Giankarlo Romulus era el capitán de Liberia U-21 (Instagram).

Romulus pronto comenzó a llamar la atención en Liberia, tanto por su juego como por su aspecto físico. Entre sus compañeros lo bautizaron como “Yamal” debido a su parecido en los rasgos faciales con Lamine Yamal, la joven estrella del Barcelona. Eso sí, las similitudes se quedan en lo estético, pues mientras el culé mide 1,80 y juega como extremo, Giankarlo alcanza 1,91 metros de estatura y se desempeña como defensa central.

Hay algunos que llegan al equipo y solo me reconocen por Yamal, hay algunos que solo me dicen ‘Yamal, Yamal, Yamal’, y hasta después se dan cuenta que ese no es mi nombre, porque desde que llegué al equipo me dijeron de ese parecido, y así me quedó el apodo ya, Lamine Yamal”, contaba en abril para La Teja.

Lamine Yamal tiene un doppelgänger en suelo tico (Getty Images).

¿Cómo juega Giankarlo Romulus?

La potencia física y el juego aéreo son dos de los principales atributos que le destacan al joven zaguero, características que lo hacían una apuesta segura en Liberia. Wilson Múñoz, entrenador del equipo sub-21, lo tuvo como capitán y asegura que el cachorro está destinado a grandes cosas.

Giankarlo Romulus se impone por su físico (Instagram).

“Es un excelente proyecto, un gran muchacho como jugador y persona, si hablamos de biotipos en la actualidad, ni qué decir, es un jugador bastante completo, no tengo duda de que es uno de los muchachos que va a llegar a primera división. Creo que es un jugador con mucha proyección para el fútbol nacional”, afirmó el técnico.

Romulus ya había tenido minutos en el primer equipo liberiano bajo la dirección de José Saturnino Cardozo en el Torneo de Copa, pero los manudos aprovecharon que aún no había firmado su primer contrato para ficharlo y potenciarlo desde el CAR.