El Deportivo Saprissa llega a la última jornada del Torneo Clausura 2025 con la obligación de jugarse el todo por el todo si quiere meterse en la fase final del torneo. El equipo, que no ha tenido el rendimiento esperado en tramos clave del campeonato, depende no solo de su resultado, sino también de combinaciones externas para clasificar.
La presión recae sobre todo en su técnico, Paulo Wanchope, quien deberá demostrar temple y liderazgo en el momento más caliente de la temporada. Durante su recorrido al mando de los morados, Wanchope ha intentado tomar decisiones importantes respecto al plantel, especialmente con ciertos jugadores que no han rendido como se esperaba.
Sin embargo, varias de esas decisiones hoy parecen imposibles de ejecutar y esto podría colocar en jaque su futuro en Saprissa antes de quedar eliminado. El técnico se juega mucho más que una clasificación: también su credibilidad y el futuro inmediato en el banquillo de Saprissa.
¿Quién le está poniendo trabas al proceso de Wanchope en Saprissa?
Desde su llegada al banquillo morado, Paulo Wanchope tuvo en mente realizar una limpieza profunda en el plantel del Deportivo Saprissa, buscando renovar energías y armar un equipo más competitivo.
Sin embargo, ese plan se topó con la dura realidad: el periodista Christian Sandoval comentó que la mayoría de los jugadores tienen contrato vigente, lo que vuelve inviable una reestructuración a fondo.
“Si el Saprissa queda afuera de nada va a servir porque en el equipo no va haber ninguna limpia. Por ejemplo, Sabin Merino uno de los grandes señalados tiene contrato de año y medio. Nicolás Delgadillo tiene contrato de 2 años más y así varios ejemplos. Entonces, ¿cuál limpia? Solo hay dos jugadores que terminan contrato“, comentó el periodista Christian Sandoval
El panorama gris de Paulo Wanchope en Saprissa
Con este panorama, Paulo Wanchope, incluso si continúa como entrenador del Saprissa tras el Clausura 2025 —clasifique o no a la fase final—, se verá atado de manos para ejecutar el plan de limpieza que tenía en mente.
La intención de renovar la plantilla y desprenderse de ciertos jugadores no será posible en el corto plazo, ya que muchos futbolistas tienen contrato vigente y el club no está en condiciones de asumir una reestructuración masiva.