Managua FC dio un golpe de autoridad en el fútbol nicaragüense al clasificarse a la final del campeonato, luego de vencer al Real Estelí en una dramática tanda de penales por 5-4, tras igualar 2-2 en el global durante los 90 minutos reglamentarios. Con este resultado, los capitalinos mantienen vivo su objetivo de defender el título obtenido en la campaña anterior.
La eliminación generó un auténtico terremoto deportivo en el Tren del Norte, que nuevamente queda fuera de la final del torneo local. El fracaso cayó como un balde de agua fría en el entorno del club rojiblanco, que ya venía arrastrando cuestionamientos por los resultados irregulares de esta temporada. La directiva no tardará en tomar decisiones drásticas para revertir la situación.
La primera consecuencia de este duro golpe sería la salida del futbolista Kadeem Cole, quien dejaría de forma inmediata al Real Estelí para unirse al Birmingham Legion FC, club que compite en la USL Championship de Estados Unidos. Aunque la institución norteña aún no emite un comunicado oficial, diversas fuentes indican que su salida es inminente.
La marcha de Cole supone una pérdida sensible para el Estelí, ya que el jugador había sido una de las piezas más utilizadas durante el torneo. Su salida, sumada al nuevo traspié en la competencia local, obliga al club a replantear su rumbo de cara a lo que resta de la campaña y, sobre todo, al próximo proyecto deportivo.
Real Estelí ha caído en un pequeño bache en este último año, lo que ha causado que tenga una sequía y que ha sido aprovechado por Managua para tomar ventaja, mientras que Diriangén aún sigue dominando la tabla histórica.
