Comunicaciones FC ya puso en marcha su preparación con los trabajos de reacondicionamiento físico, aunque lo ha hecho en medio de un hermetismo total. Hasta el momento, la institución alba no ha anunciado bajas ni refuerzos, y la única certeza es que la continuidad de Iván Franco Sopegno no está asegurada para el Torneo Clausura 2026.
En ese contexto, desde Nicaragua ha surgido un nombre que comienza a tomar fuerza para ocupar el banquillo crema. Se trata del entrenador chileno Marco Antonio Figueroa, quien podría asumir la responsabilidad de dirigir a los Albos en un semestre clave para la historia reciente del club.
El estratega sudamericano viene de dirigir a la Selección de Nicaragua en la reciente eliminatoria mundialista, experiencia que le permitió mantenerse vigente en el ámbito centroamericano. Según reportan medios nicaragüenses, Figueroa aparece como uno de los candidatos para llegar a Comunicaciones, e incluso que ya tendría cerrado todo para regresar a los cremas, en una apuesta que buscaría carácter y liderazgo para revertir el complicado momento deportivo.
¿Cambio de técnico en Comunicaciones?
La información toma mayor relevancia si se recuerda que Cristian Cáceres, presidente del club, confirmó días atrás que en los próximos días se darán a conocer los movimientos del equipo de cara al siguiente campeonato, tanto a nivel de plantilla como en el cuerpo técnico y lo harían con Figueroa que ya sabe que es estar en el club y que incluso hace unos meses fue postulado para dirigir a la Selección de Chile.
La urgencia es evidente. Comunicaciones se encuentra en la última posición de la tabla acumulada, ocupando puestos de descenso, una situación impensable para una de las instituciones más grandes del fútbol guatemalteco y que obliga a tomar decisiones firmes y acertadas.
Por ello, la elección del nuevo entrenador será determinante. El técnico que llegue al banquillo crema deberá asumir la presión de sacar al equipo del descenso, recuperar la identidad competitiva y devolver a Comunicaciones al lugar que históricamente ha ocupado en la Liga Nacional. El margen de error es mínimo y el reto, mayúsculo.
