Los certámenes juveniles son de suma importancia en el desarrollo de los jugadores. Muchos de los que fueron y son parte del nivel más alto del fútbol han disputado este tipo de eventos. Al margen de los Mundiales Sub-20 y Sub-17, así como las Eliminatorias para los mismos, hay otro torneo que atrae las miradas del mundo y pone a los jóvenes como protagonistas: el Torneo Maurice Revello.
Para aquel fanático del deporte rey que lo agarre desprevenido ese nombre, se trata del antiguamente llamado “Esperanzas de Toulon”. Un buen número de selecciones alrededor del mundo han participado del mismo, brindando la oportunidad a chicos (que como mucho alcanzan los 20 años de edad) de ser vistos por grandes instituciones.
Costa Rica ha sido invitada por segunda vez para participar de esta competición, luego de su incursión en la edición de 2015 donde finalizó en la cuarta colocación del Grupo A, donde venció a Estados Unidos; empató con Qatar y cayó ante Países Bajos y Francia. En esta ocasión, volverá a integrar dicha zona junto a los galos; Venezuela y Arabia Saudita.
El lunes 5 de junio desde las 6 AM de Centroamérica, La Sele enfrentará a los sudamericanos en Aubagne. Tres días más tarde hará lo propio, desde las 9:30 AM, contra los europeos en Mallemort. Cerrará su paso por esta ronda jugando ante los asiáticos en un contexto similar al del choque frente a la vinotinto: en Aubagne y a las 6 AM.
Solo el ganador de cada cuadrante, así como el mejor segundo, avanzarán a las semifinales del viernes 16 de junio. El resto disputará duelos de posicionamiento un día antes. La gran final será, por último, el domingo 18 a las 10 AM de Centroamérica.