El nombre de Kenyel Michel ha estado en boca de todos desde su brillante actuación en el clásico nacional, donde fue figura en la victoria de la Liga Deportiva Alajuelense sobre Saprissa. Su velocidad, desequilibrio y doblete en el Morera Soto no solo consolidaron su momento en el fútbol costarricense, sino que confirmaron por qué su futuro ya está fuera del país.

El joven atacante de 21 años dejará Costa Rica en diciembre para unirse oficialmente al Minnesota United de la MLS, un salto importante en su carrera tras ser vendido en una operación histórica para la Liga. Michel viajará en febrero para incorporarse a la pretemporada del club norteamericano, donde podría reencontrarse con una figura clave en su formación: Albert Ballesteros, exentrenador de ligas menores rojinegras y actual integrante del cuerpo técnico del Austin FC.

Ballesteros, quien trabajó con Kenyel Michel durante más de dos años en las divisiones inferiores de Alajuelense, conversó con medios nacionales desde Estados Unidos y le envió un claro mensaje al joven tico sobre los retos que le esperan en la MLS.

¿Cuáles es la advertencia que le enviaron a Kenyel Michel?

Tiene que trabajar mucho. Es un chico con condiciones, rápido, ligero, fino… pero el fútbol en Estados Unidos exige un nivel físico y táctico altísimo. Si mantiene la humildad y el esfuerzo que mostró en la Liga, puede triunfar”, advirtió el técnico español.

Albert Ballesteros le envió un mensaje a Kenyel Michel. (Foto: Getty Images)

El entrenador conoce bien el proceso de Michel, a quien dirigió desde la U-17 hasta el Alto Rendimiento, y recordó cómo el extremo evolucionó hasta convertirse en un futbolista más completo.

“En el primer torneo con nosotros fue el máximo goleador del equipo, aunque le costaba marcar al principio. Aprendió rápido la importancia del trabajo defensivo, incluso llegó a jugar de carrilero una temporada. Eso le dio fundamentos que hoy se notan en su rendimiento”, añadió.

Ballesteros no escatimó elogios al describir el perfil del atacante manudo, al que considera listo para competir en el extranjero, aunque con una advertencia clara: el talento no bastará si no mantiene su disciplina y mentalidad.