El sueño de Liga Deportiva Alajuelense de representar a Concacaf en el Mundial de Clubes 2025 parece haber recibido un golpe definitivo desde lo más alto del fútbol mundial. El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, hizo una fuerte confirmación.
¿Cuál es la confirmación que dio Infantino sobre el Mundial de Clubes?
Este fin de semana, el mandamás del máximo ente del fútbol anunció la intención del máximo ente del balompié es organizar un repechaje entre LAFC y el Club América, dejando así fuera del panorama a los rojinegros.
“La intención de la FIFA es jugar un playoff entre el subcampeón de la Concachampions, LAFC, y el siguiente en el ranking, que es el América”, indicó Infantino, en una declaración que no tardó en provocar reacciones en Costa Rica.
Este anuncio echa por tierra las esperanzas que Alajuelense venía cultivando desde hace meses, tras haber impulsado un recurso legal ante el TAS para impugnar la participación del Club León por supuestas irregularidades reglamentarias. Aunque la gestión manuda fue reconocida incluso por figuras como el técnico Miguel “Piojo” Herrera, el panorama actual indica que la decisión final de FIFA prioriza un enfoque comercial y competitivo por encima de la reclamación administrativa presentada por los ticos.

LAFC y América definirían el clasificado al Mundial de Clubes.
América y LAFC, favoritos por mercado
La fórmula planteada por FIFA —enfrentar al subcampeón de la Liga de Campeones de Concacaf 2023 (LAFC) contra el mejor ubicado en el ranking (América)— responde claramente a un interés de alto impacto en taquilla, audiencia y marketing. Ambas instituciones cuentan con grandes bases de aficionados en Estados Unidos, sede del próximo Mundial de Clubes, y eso parece haber pesado más que cualquier argumento reglamentario.

ver también
Ni América ni LAFC: Alajuelense tiene nuevo rival de peso rumbo al Mundial de Clubes que gusta mucho en FIFA
Para la afición liguista y costarricense en general, la noticia cae como balde de agua fría. Desde la dirigencia de Alajuelense no se ha emitido una reacción oficial, pero el sentimiento generalizado es de frustración ante una FIFA que parece mirar más hacia el negocio que hacia la justicia deportiva.