Antes del inicio del la Copa del Mundo en Qatar fueron varias las selecciones que habían tomado la decisión de utilizar un brazalete LGBT como protesta de respetar los derechos de todas las personas. Sin embargo, una respuesta contundente de la FIFA obligó a que esto no sucediera. En tal caso de que a Costa Rica o cualquier equipo de Concacaf hubiese tomado esta decisión, también recibiría la misma amenaza. 

Inglaterra, Países Bajos y Gales se habían comprometido a lucir el símbolo en defensa del colectivo LGTBI en sus estrenos de este lunes, pero sus federaciones no quieren arriesgarse a que vean una tarjeta amarilla. Por este motivo, para evitar contratiempo con sus jugadores durante la Copa del Mundo que pueda dejarlos al borde de perderse un partido, tomaron la determinación de hacerle caso a la FIFA

La amenaza de amonestaciones de Infantino ha sido lo que ha terminado rindiendo a los futbolistas. “Como federaciones nacionales no podemos poner a nuestros jugadores en una posición en la que puedan enfrentar sanciones deportivas, incluidas tarjetas”, indicaron las siete federaciones de fútbol este lunes a través de un comunicado conjunto.

Como es sabido desde el momento en que Qatar fue designado como país organizador, la actual Copa del Mundo estuvo envuelta en constantes polémicas y críticas hacia las autoridades de Medio Oriente. Uno de los puntos más contenciosos desde el principio fue la postura de la nación con respecto a la homosexualidad, la cual es prohibida en este país.