En tiempos de pandemia de coronavirus, las cuarentenas se han extendido y prolongadoa nivel mundial, con el objetivo de ponerle freno a los contagios y hacer que la curva de infectados se pueda hacer bajar lo más pronto posible.
Esto mantiene a todos en sus casas tratando de combatir el aburrimiento, la soledad, y en muchos casos también, el desarraigo. Muchas personas se encuentran a kilómetros de distancia de sus países de origen, ya sea porque viven afuera, o porque se quedaron “atrapados” en otro lugar mientras estaban de viaje.
Y es aquí donde comenzó esta conmovedora anécdota que le ocurrió a una hondureña radicada en Roma, Italia. La compatriota, llamada Sheyla, vio como todos los italianos colocaban banderas de su país en sus balcones, y decidió hacer lo mismo con la bandera de Honduras.
Según ella misma relató, en determinados días y a cierta hora se escuchaba música, para luego terminar con el himno de Italia. Sin embargo, cuando terminó el cántico italiano, llegó una sorpresa que le sacaría unas cuantas lagrimas; o mejor dicho, la haría pegar una gran “chillada“, según la propia Sheyla describió.
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Resulta ser que los vecinos italianos le pidieron que volviera cuando estaba a punto de entrar a su cuarto, para poner el himno nacional de Honduras a todo volumen. Acá el relato completo: ¡Conmovedor!