El galés sufrió una lesión en su cadera ante el Sporting de Lisboa y su participación del fin de semana corre peligro.

La agónica victoria del Real Madrid ante el Sporting de Lisboa ha dejado un saldo negativo para el equipo de Zinedine Zidane.

Porque si bien se han llevado un triunfo que parecía casi imposible, la lesión de Gareth Bale preocupó a todos los madridistas.

El galés es uno de los puestos “irremplazables” para los merengues, porque hoy por hoy no cuenta con un extremo neto como lo es Bale.

Sin embargo, se cree que volvería recién para el duelo con Villarreal (el miércoles) y su lugar para el partido del fin de semana ante el Espanyol lo ocuparía James Rodríguez.