Tomáš Koubek y Lukáš Vách acusaron a una jueza de línea de tener que “ir a la cocina” y su presidente los envió a entrenar con el fútbol femenino.

Tomáš Koubek y Lukáš Vách son jugadores del Sparta de Praga que el fin de semana pasado tuvieron una peculiar actuación.

Porque en su duelo ante Zbrojovka Brno, en el que empataron 3-3, estos dos futbolistas le protestaron a la jueza de línea por no cobrar un fuera de lugar con un machismo explícito.

“Las mujeres deberían estar en la cocina y no arbitrando un partido de hombres”, le dijeron, y la noticia comenzó a retumbar por todo el mundo del fútbol.

Sin embargo, esto no pasó así como así, y el presidente de la institución, Daniel K?etínský, confirmó que tanto Vach como Koubel deberán comenzar a entrenar con el equipo femenino del Sparta Praga como castigo por sus declaraciones.