En la noche del sábado, la selección de Honduras que dirige Reinaldo Rueda consiguió una victoria clave ante México en el partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Naciones Concacaf 2024.
Con un doblete del ingresado Luis Palma, los catrachos hicieron valer su localía en el Estadio Francisco Morazán, sacando una ventaja crucial de cara a la revancha. Sin embargo, la alegría del triunfo fue opacada por un lamentable incidente ocurrido tras el pitazo final.
La salvaje agresión que manchó el triunfo catracho
En un hecho condenable, Javier Aguirre, entrenador del combinado azteca, fue impactado en la cabeza por una lata llena arrojada desde la parcialidad hondureña.
El proyectil le provocó al Vasco un corte profundo que comenzó a sangrar de inmediato, causando consternación tanto en el cuerpo técnico mexicano como en la delegación hondureña, que condenó lo ocurrido.
El Francisco Morazán, que se caracteriza por la cercanía de las gradas al campo, fue escogido por la Federación de Fútbol de Honduras especialmente para este encuentro, buscando aprovechar la presión que ejerce su afición.
Sin embargo, esta característica también facilita incidentes como el que sufrió el entrenador de México. Durante el partido, ya se habían registrado varios lanzamientos de objetos hacia el terreno de juego, lo que refleja el clima hostil que se vivió a lo largo de la velada.
¿Concacaf sancionará a Honduras?
Ante este condenable incidente, se espera que Concacaf intervenga y aplique sanciones severas, que podrían incluir la pérdida de la localía para Honduras en el Francisco Morazán.
Mientras tanto, la atención se centra ahora en el partido de vuelta, que se disputará el próximo martes 19 de noviembre en territorio mexicano. Honduras buscará defender la ventaja obtenida y evitar repetir el desenlace de la edición anterior del torneo, cuando venció a México 2-0 como local, pero fue eliminada tras caer por el mismo marcador en la vuelta y perder en la tanda de penales.