Lamentables incidentes de violencia empañaron el partido amistoso entre Xelajú de Guatemala y FAS de El Salvador , disputado en el estadio Mario Camposeco de Quetzaltenango. Tras la contundente victoria local por 4-0, se registraron agresiones contra aficionados del FAS por parte de seguidores locales .
Estos hechos ocurrieron al finalizar el encuentro, cuando los hinchas salvadoreños se dirigían hacia los autobuses que los transportarían de regreso a su país. Según reportes, un grupo de aficionados de Xelajú los atacó lanzando piedras e incluso utilizando objetos contundentes.
La violencia una vez más en el fútbol de Concacaf
Las agresiones provocaron lesiones a varios aficionados del FAS , quienes tuvieron que ser atendidos por personal médico. La situación generó gran conmoción y repudio por parte de las autoridades deportivas de ambos países, quienes condenaron enérgicamente la violencia y anunciaron la apertura de investigaciones para identificar a los responsables.
Este tipo de incidentes no tienen cabida en el deporte, y es fundamental que se tomen medidas contundentes para erradicar la violencia de los escenarios deportivos. La seguridad de los aficionados debe ser una prioridad absoluta, y se debe trabajar en conjunto para promover el respeto y la sana convivencia en el fútbol.
Es importante destacar que estos actos no representan al conjunto de la afición del Xelajú, y que la mayoría de los seguidores locales disfrutaron del partido de manera pacífica. Sin embargo, es necesario que se haga un llamado a la reflexión y se tomen acciones para evitar que este tipo de hechos se repitan en el futuro.**
Así que es importante resaltar que el fútbol debe ser un espacio para la unión y el disfrute, no para la violencia y la agresión. Es necesario trabajar en conjunto para promover valores como el respeto, la tolerancia y la deportividad, y construir un ambiente seguro e inclusivo para todos los aficionados.