Este domingo se vivió una situación insólita en el Estadio Alejandro Morera Soto, donde Liga Deportiva Alajuelense y Deportivo Saprissa protagonizaron un nuevo capítulo del clásico del fútbol costarricense.
Los manudos, que llegaron al duelo como invictos en el Torneo Apertura 2024, se encontraron con un Saprissa decidido a cambiar la historia. En la primera mitad, el cuadro dirigido por Vladimir Quesada sorprendió a todos cuando Ariel Rodríguez conectó un cabezazo que adelantó al equipo tibaseño.
Alajuelense se despertó en la segunda mitad
El segundo tiempo trajo consigo la reacción del equipo de Alexandre Guimarae. A los 67 minutos, el brasileño Anderson Canhoto logró igualar el marcador con un remate certero.
A pesar de los esfuerzos de los rojinegros por llevarse la victoria, la sólida actuación del portero saprissista, Esteban Alvarado, impidió que los locales se quedaran con los tres puntos, manteniendo el empate hasta el pitido final.
El incidente que sacudió a Saprissa en el entretiempo
Durante el entretiempo, un incidente captó la atención de todos cuando las cámaras de televisión enfocaron una acalorada pelea entre dos figuras clave de Saprissa: el portero Esteban Alvarado y el delantero jamaiquino Javon East.
La situación se tornó tensa cuando Alvarado, visiblemente alterado, corrió hacia su compañero para encararlo. Aunque las razones detrás del conflicto no quedaron claras, la confrontación fue lo suficientemente intensa como para que otros jugadores morados intervinieran para evitar que la disputa pasara a mayores.
A pesar del momento de furia, ambos futbolistas fueron contenidos y se dirigieron al vestuario, donde Vladimir Quesada, técnico de Saprissa, les dio la charla técnica de cara al complemento.