Jugó en dos de los clubes más grandes de Costa Rica, disputó tres mundiales con la Selección Nacional, uno sub 20 y dos mayores, y fue uno de los atacantes más veloces y desequilibrantes de su época. Sin embargo, cuando llegó la hora del retiro decidió dar un giro radical: dejar atrás el balón y dedicarse a un deporte completamente distinto.

¿Cuál es el futbolista ex Saprissa que cambió totalmente su vida deportiva?

Se trata de William Sunsing, recordado delantero que vistió las camisetas de Saprissa y Herediano, además de militar en otros equipos dentro y fuera del país. Su carrera se desarrolló principalmente en la década del 2000, cuando alcanzó su mejor nivel futbolístico.

En 2012 dijo adiós a las canchas, pero lejos de alejarse del deporte, impulsó su faceta social y educativa. Fundó la empresa “Generación Diferente”, dedicada a talleres motivacionales y proyectos de formación para jóvenes, además de una escuela de fútbol para niños.

Del balón al gimnasio

Fue en 2017 cuando Sunsing sorprendió a todos al dedicarse profesionalmente al culturismo y fitness, disciplina en la que encontró su verdadera pasión. Con constancia y trabajo, logró competir a nivel nacional y consolidarse como referente en este nuevo ámbito deportivo.

El cambio físico de William Sunsing

El exatacante asegura que la disciplina del fútbol le sirvió como base para triunfar en el gimnasio: el compromiso con los entrenamientos, la alimentación y la mentalidad competitiva son los mismos, aunque aplicados a un escenario muy distinto. Esa capacidad de adaptación le permitió reinventarse tras colgar los tacos.

Hoy, Sunsing combina su faceta deportiva con el trabajo comunitario, convirtiéndose en un ejemplo de que la vida después del fútbol no tiene que ser un adiós, sino una oportunidad para escribir nuevas historias. Su mensaje es claro: la pasión verdadera no se abandona, solo se transforma.