En el siempre apasionado y polémico entorno del fútbol costarricense, Jafet Soto, presidente del Herediano, ha vuelto a levantar la voz, pero esta vez no es contra los tradicionales rivales de su equipo, Saprissa o Alajuelense. En un reciente episodio que ha sacudido el fútbol nacional, Soto ha dirigido sus críticas hacia la Unafut, el ente encargado de la administración de la primera división.

¿Qué le dijo Jafet Soto a Unafut?

Durante una entrevista en el programa Encuentro Deportivo con el periodista Yashin Quesada, el dirigente herediano acusó a la Unafut de ser ineficiente y poco dialogante, lo que ha generado tensiones entre los clubes y el organismo.

Soto criticó duramente a la presidenta de la Unafut, Vicky Ross, y no escatimó en palabras fuertes: “Cuando se creen la República Independiente de Unafut, las cosas no van a funcionar, porque ellos trabajan para los 12 equipos de la primera división”.

El conflicto entre Jafet Soto y la Unafut ha escalado principalmente debido a la negativa de reprogramar los partidos pospuestos entre Alajuelense-Herediano y Liberia-Saprissa durante la fecha FIFA de noviembre. En esta ventana, la Selección Nacional de Costa Rica disputará un crucial partido contra Panamá, en busca de un boleto al Final Four de la Liga de Naciones.

Para Soto, la negativa de la Unafut a revisar el calendario y buscar una solución de consenso es inaceptable. “Es de sentarse con don Claudio (Vivas, técnico de la Selección), la Liga, Herediano y Unafut y de buscar una solución. La prioridad siempre va a ser la Selección Nacional”, expresó Soto.

Sin embargo, el presidente de Herediano acusó a la Unafut de no mostrar voluntad de diálogo. “Uno esperaría otra respuesta, más diálogo. Esto no es Venezuela“, añadió Soto, en lo que parece ser una clara crítica a la falta de apertura del organismo hacia los clubes.

¿Una fractura interna en el fútbol costarricense?

La disputa entre Jafet Soto y la Unafut podría representar algo más profundo que un simple desacuerdo sobre la reprogramación de partidos. Estas tensiones podrían ser indicativas de una fractura más amplia dentro del fútbol costarricense, donde algunos clubes, como Herediano, se sienten marginados por la gestión centralizada de la Unafut. Soto no ha sido el único en expresar su descontento, pero sí uno de los más vocales y directos al criticar a la dirigencia del ente rector del fútbol de primera división.