La Federación Costarricense de Fútbol (Fedefútbol) dio un paso histórico en octubre al anunciar oficialmente, junto a Estados Unidos, México y Jamaica, su candidatura para albergar la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2031.

De concretarse, este sería un hito sin precedentes para Costa Rica, que ya ha sido sede de Mundiales Sub-17 y Sub-20 femeninos, pero nunca de una justa mundialista de selecciones absolutas.

Estoy seguro de que vamos a estar a la altura para poder hacerlo de la mejor manera”, expresó Osael Maroto, presidente de la Federación. Sin embargo, más allá del optimismo del jerarca, la propuesta aún debe ser evaluada a fondo por la FIFA, que tomará una decisión definitiva tras comparar las diferentes candidaturas en 2026.

Un encuentro clave para Costa Rica

En medio de este proceso, Costa Rica recibió una noticia que podría inclinar la balanza en su favor. Durante el pasado fin de semana, San José fue sede de la XXIV edición del Congreso Ordinario de la Unión Centroamericana de Fútbol (UNCAF), un evento que reunió a las máximas autoridades del fútbol regional.

Osael Maroto formó parte del Congreso de la UNCAF (FCRF).

Allí estuvieron presentes Pedro Chaluja, presidente de UNCAF, Osael Maroto junto a los representantes de las otras seis federaciones centroamericanas, y, como figura destacada, Víctor Montagliani, presidente de Concacaf y vicepresidente de la FIFA.

Montagliani impulsa a los ticos ante la FIFA

En su discurso ante los dirigentes, el empresario canadiense “reafirmó el pleno apoyo de la Concacaf a la candidatura conjunta de cuatro naciones anunciada recientemente por Costa Rica, Jamaica, México y Estados Unidos para albergar la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2031”, según detalló la propia Confederación en su página oficial.

El vicepresidente de la FIFA respalda a Costa Rica (Concacaf).

De esta manera, la Fedefútbol ha obtenido el aval que necesitaba para consolidar su candidatura. La decisión final dependerá de la FIFA, pero con el respaldo regional asegurado, Costa Rica empieza a ilusionarse seriamente con la posibilidad de ver un Mundial absoluto en casa.