En cuestión de horas, Keylor Navas se las arregló para materializar un escenario que parecía ser imposible: pasar de referente absoluto a enemigo público número uno en el Parque Independencia.
La afición de Newell’s Old Boys, que lo había elevado a lo más alto desde su llegada, lo fulminó sin piedad en redes sociales luego de conocerse que no sería parte del debut en el Torneo Clausura 2025 por un supuesto malestar estomacal. La noticia cayó como una bomba, sobre todo en medio de los crecientes rumores que lo vinculan a Pumas de la UNAM en la Liga MX.
Newell´s jugó sin arquero suplente y la afición estalló
Aunque el técnico Cristian Fabbiani había asegurado que contaba con el tico para visitar a Independiente Rivadavia, finalmente el arquero no apareció en la convocatoria. Williams Barlasina fue titular y Keylor ni siquiera se hizo presente en el estadio Bautista Gargantini, dejando al equipo sin arquero suplente.
Fue el delantero Darío Benedetto quien asumió la responsabilidad de usar el buzo de emergencia en caso de necesidad. La reacción de los hinchas no tardó en llegar: bronca, insultos y una sensación generalizada de traición.
La dura medida de la directiva de Newell´s con Keylor Navas
En medio del escándalo, la dirigencia rojinegra, encabezada por el muy cuestionado Ignacio Astore, tomó una decisión tajante. Según reveló el periodista Gonzalo Calvigioni tras el partido, el club ya resolvió que Keylor Navas no volverá a defender el arco de Newell’s.
“No sé cómo será su salida del club, pero Navas NO ATAJA MÁS en Newell´s”, afirmó Calvigioni en sus redes sociales. El vínculo del portero con los rosarinos se extiende hasta diciembre de 2026, por lo que para concretar su salida será necesaria una oferta formal desde México que satisfaga a la institución. De lo contrario, quedará “colgado” del plantel, entrenando apartado y sin ser tenido en cuenta.
Las redes estallaron con mensajes de apoyo de los hinchas rojinegros para la medida: “Listo, que pongan la plata o un año y medio cortando el pasto, desagradecido”, “Ojalá que queda colgado hasta diciembre de 2026, no puede dejar al plantel sin arquero suplente un rato antes del partido”, “Si no llegan más de 5 millones que le compren una máquina para que corte el pasto en el predio”.
Los próximos días serán clave para definir el futuro inmediato de Keylor, pero lo que está claro es que su ciclo en Newell’s terminará de la peor manera. Rosario le cierra las puertas, y ahora todo depende de que desde México lleguen los dólares que permitan cerrar un capítulo que ya quedó marcado por la decepción.