Paulo César Wanchope asumió el mando de un Deportivo Saprissa golpeado y sin rumbo en plena temporada del Torneo Clausura 2025. Bajo la conducción de José Giacone, el equipo no encontraba respuestas futbolísticas, estaba fuera de zona de clasificación y acumulaba cuestionamientos por todos lados.
Con un plantel limitado, “Chope” logró lo que parecía difícil: cambiarle la cara al Monstruo. Los números hablan por sí solos: desde su llegada, Saprissa acumula 8 victorias, 3 empates y solo una derrota, lo que representa un rendimiento del 72% y la clasificación a las semifinales.
Wanchope confirma la limpieza que se viene
Ahora, en la previa del partido de ida frente a Club Sport Herediano, Wanchope tocó un tema que ya se venía anticipando en Tibás: la inminente reestructuración del plantel, sin importar cómo termine la temporada.
Aunque evitó referirse a nombres puntuales, el estratega morado fue directo: “No nos podemos conformar con lo hecho, la institución no se va a conformar con lo que ha visto. Es importante, independientemente de lo que pase de aquí en adelante, cuando termine esto, hacer la evaluación y mejorar”, afirmó en diálogo con La Nación.
Las palabras del DT van en sintonía con lo que ya había adelantado el gerente general Gustavo Chinchilla, quien fue categórico días antes de sellar la clasificación a la fase final.
“Vamos a tomar las decisiones que se tienen que tomar, porque Saprissa no merece estar en las circunstancias en que está. Indiferentemente, aunque Saprissa llegue a una final y la gane, yo le garantizo a la afición saprissista que vamos a hacer una evaluación profunda del desempeño administrativo y deportivo de este torneo”, sentenció Chinchilla en declaraciones para Teletica Radio.
¿Quiénes se despiden de Saprissa?
Aunque en Tibás evitan adelantar nombres, en el entorno morado ya suenan con fuerza varias posibles salidas. Gino Vivi y Eduardo Anderson encabezan la lista de jugadores con un pie fuera, mientras que la continuidad de Óscar Duarte también está en duda.
Por fuera del campo, uno de los que más críticas ha recibido es el gerente deportivo Sergio Gila, quien aparece como uno de los principales apuntados por la cúpula.