Con el mercado de fichajes del fútbol costarricense cerrado, Paulo César Wanchope ya conoce a la plantilla con la que afrontará su nuevo desafío al mando de Deportivo Saprissa.
Su debut oficial será este domingo en La Cueva a las 3:00 p.m. (hora de Centroamérica) ante San Carlos, y aunque el técnico no podrá realizar incorporaciones desde el exterior, sí cuenta con la cantera como una fuente de talento lista para reforzar al primer equipo.
En el último tiempo, el semillero morado ha sido clave en la formación de futbolistas como Kenay Myrie y Dax Palmer, quienes hoy se encuentran consolidados en la máxima categoría.
Ahora, hay un nuevo grupo de jóvenes talentosos que esperan una oportunidad bajo la dirección de Wanchope, y uno de los nombres que más ilusiona a los tibaseños es Brandon Matarrita.
Brandon Matarrita, la joya que quiere su oportunidad
A sus 19 años, Matarrita es uno de los jugadores con mayor proyección en el equipo Sub-21 del Monstruo. Extremo veloz y con experiencia en las selecciones juveniles de Costa Rica, había salido a préstamo a Guadalupe, pero a principios de año, el cuerpo técnico de José Giacone lo llamó de vuelta a Tibás.
A pesar de ello, todavía no ha tenido su debut oficial con el primer equipo, algo que le genera gran ilusión. “Estaba a préstamo pero regresé, me pidieron en primera cuando estaba Giacone. Ahora estoy entrenando con ellos, esperando la oportunidad y seguir aportando en la Sub-21“, comentó Matarrita, quien no ocultó su deseo de ser tomado en cuenta por Wanchope.
“Si en un momento (Wanchope) quiere darme una oportunidad, estoy atento, igualmente entreno como si me fueran a tomar en cuenta siempre”, agregó el atacante, dejando un mensaje claro al nuevo DT.
Una generación que hace soñar a los morados
El nombre de Matarrita no es el único que genera expectativas en la afición morada. Junto a él, hay otros jóvenes talentos que podrían recibir una oportunidad bajo el mando de Wanchope.
Uno de ellos es Akheem Wilson, atacante de 18 años, mientras que Thiago Cordero, defensor de solo 15 años, es considerado una de las mayores promesas del país y ya es capitán de la Selección Sub-17 de Costa Rica.